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| MALUENDA |
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La localidad conserva interesantes muestras de arquitectura civil aragonesa |
Sobre la ribera derecha del
río
Jiloca, Maluenda depara la grata sorpresa de sus magníficos
monumentos
mudéjares y de las ruinas de su castillo
musulmán, fortaleza que ya existía en el siglo X, ya
que, según al-Udri, el propio Abderramán III acampó
ante los muros del castillo de Malunda, nombre con el que aparece nombrada
la villa en los documentos de la época. La iglesia parroquial está
dedicada a Santa
María. Su fábrica es de ladrillo, tapial y yeso, de estilo
mudéjar. Tiene portada gótica, del siglo XV, construida
con posterioridad al edificio. La torre se corresponde con el tiempo de
construcción de la iglesia y es también de estilo mudéjar,
del siglo XIV; de planta cuadrada; se decora con ladrillos de formas romboidales,
con remate en flecha octogonal. Dirigió las obras del conjunto arquitectónico
Yusuf Adolmalich, de la aljama de Calatayud,
a expensas de Benedicto
XIII, el papa Luna.
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La iglesia
de las Santas Justa y Rufina, de amplias dimensiones, tiene características
bastante semejantes a la parroquial- En el exterior, una de sus fachadas
se adorna con una puerta en arco apuntado con dos arquivoltas, sobre la
que se abren cuatro ventanas también con arco apuntado de ladrillo.
Aún existe una tercera iglesia, la de San
Miguel, en estado ruinoso y de características semejantes a
las anteriores. El convento de carmelitas es fiel al estilo aragonés,
como obra del siglo XVII. Tiene iglesia barroca, con planta de cruz latina.
La ermita del Santo Cristo
está situada junto a la carretera de Calatayud
y Daroca. En su interior tres lienzos de la Pasión de Cristo, pertenecientes
a la escuela aragonesa del grupo de Pablo Rabiella. (Alfonso Zapater Gil)
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