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| La IFC inicia una colección sobre Canto Gregoriano
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EL PERIÓDICO. Zaragoza | El servicio de publicaciones de la Institución Fernando el Católico ha puesto en marcha la colección editorial Monumenta Monodica Aragonensia, correspondiente a los trabajos de la Cátedra de Música Medieval Aragonesa sobre el Canto Gregoriano en Aragón.
Esta nueva colección se inicia con la publicación del estudio Munébrega I. Un testimonio aragonés de la cultura litúrgico-musical de los siglos XIII-XIV en el contexto europeo, de Luis Prensa, catedrático de Canto Gregoriano en el Conservatorio Superior de Música de Aragón.
El libro, que es una adaptación de la tesis doctoral de Luis Prensa, será presentado conjuntamente por la Institución Fernando el Católico y la Diócesis de Tarazona en el marco de un acto cultural que se desarrollará en la iglesia parroquial de Munébrega el próximo jueves, 22 de Septiembre, a las 19.30 horas. Durante el mismo tendrá lugar un concierto a cargo del grupo Domus Aurea, dirigido por Luis Prensa.
El códice Munébrega I, en pergamino, se encuentra en el Museo parroquial de esta localidad. Tiene unas dimensiones de 520 x 380 milímetros. Contiene las lecturas de Maitines, junto con el responsorio que sigue inmediatamente a cada primera lectura.
La notación musical es aquitana de transición (utiliza alcunas ligaduras, cosa inexistente en la primitiva aquitana). Usa la regla a punta seca como línea musical y corresponde a la primera mitad del siglo XIV con un probable influjo de la Escuela de Aviñón. Coincide en el tiempo con el ilustre munebreguino Juan Fernández de Heredia (1310-1396), maestre de la Orden de San Juan de Jerusalén y amigo de Benedicto XIII, el Papa Luna.
El códice objeto de la presente publicación fue encontrado en la villa de Munébrega hace 15 años. Apareció, en efecto, junto a otros 5 códices en la sacristía de la iglesia parroquial, en el transcurso de una investigación acerca de las fuentes musicales del Medievo en Aragón, y ofrece el indicio de la importante vida litúrgica que se desarrollaba en la iglesia de esta Villa en el pasado.
De hecho, este ejemplar estaba sin catalogar, pues los investigadores que recorrieron España en busca de códices litúrgicos medievales con tanto esfuerzo y acierto, nunca supieron de la existencia de este importante conjunto.
El manuscrito tiene un gran interés por ser un ejemplar escaso en el conjunto de códices aragoneses, así como por su contenido. Es bien cierto que representa un eslabón más en la cadena de transmisión de un primer "arquetipo", pero además reordena y reelabora los elementos recibidos de Europa. Es, por tanto, relevante para el estudio de una práctica litúrgica común en el Aragón del siglo XIII.
El estudio comparado de este manuscrito con otros códices aragoneses contemporáneos, anteriores y posteriores (Huesca, Monasterio de El Pueyo de Barbastro) ilustra de manera importante una época y define los contornos en los que se desenvolvía el culto cristiano en las iglesias aragonesas de la época. Finalmente, su comparación con una serie de códices europeos desvela las influencias que recibe y, por tanto, su origen y filiación de las distintas tradiciones y familias europeas.
El Periódico de Aragón (19-9-2005)
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