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En libertad el joven de 20 años que
acuchilló a otro en Sabiñán
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Gotas de sangre de la víctima en la acera tras la agresión sufrida
(Foto: Maria Gascón)
MARÍA GASCÓN | Un episodio violento salpicó el ambiente festivo que estos días vive la localidad zaragozana de Sabiñán, por las celebraciones patronales de San Roque. Todo sucedió muy rápido en la confluencia de las calles Baltasar Gracián y San Miguel, en la madrugada del sábado, cuando un joven de 20 años agredió con un cuchillo de grandes dimensiones a otro, al que llegó a clavárselo a la altura del cuello y la cara. Una pelea que acabó con este detenido, quien en la mañana de hoy, domingo, ha pasado a disposición judicial, acusado de un presunto delito de homicidio en grado de tentativa y otro de lesiones.
Finalmente, el detenido ha quedado en libertad con cargos, con una orden de alejamiento de la víctima y teniendo que presentarse los días 1 y 15 en el juzgado.
En el altercado intervino un agente de la Guardia Civil que en ese momento se encontraba fuera de servicio pero que fue decisivo para reducir al agresor y salvarle la vida a su víctima, que acabó en el hospital Ernest Lluch de Calatayud, aunque fuera de peligro y con heridas superficiales, ya que por la tarde del sábado ya se encontraba de nuevo en el municipio. El agente de la Benemérita también resultó herido en su intervención.
Según pudo saber este diario, la persona agredida y su agresor no solo se conocían, sino que compartían piso en la localidad zaragozana. Aunque se desconoce el motivo de la trifulca. Ambos precisaron atención sanitaria, aunque solo la víctima acabó en el hospital bilbilitano.
Los hechos ocurrían en torno a las 4.30 horas en una zona del municipio que da acceso a la mayoría de los espacios festivos de la programación. Sin embargo, a esa hora, muchos de los vecinos o estaban en casa o en el pabellón polideportivo, que es donde se estaba celebrando la discomóvil. En ese momento se originó un altercado "entre tres personas de origen magrebí", detallaron fuentes oficiales de la Guardia Civil. Uno de los implicados, armado con un cuchillo de grandes dimensiones, según testigos presenciales, atacó a otro, produciéndole heridas graves en el cuello y la cara. La víctima fue alcanzada en dos ocasiones con el arma blanca, que le provocó un corte de "once centímetros en la parte inferior de la mejilla y cuello, además de otro en el pabellón auditivo izquierdo".
Casualmente, en el lugar de los hechos se encontraba un agente de la Guardia Civil, natural de Sabiñán aunque perteneciente al Destacamento de Tráfico de Zaragoza. Estaba fuera de servicio pero intervino rápidamente, evitando que continuara la agresión. Su acción fue decisiva para inmovilizar al agresor y quitarle el cuchillo. Lo redujo y aguardó a que llegara al lugar la patrulla de la Benemérita, para que se lo llevara detenido.
Sin embargo, durante el forcejeo, el agente recibió varios golpes que le provocaron lesiones en el ojo izquierdo y también en la zona lumbar, por lo que tuvo que ser atendido en el centro de salud de Sabiñán. Mientras, algunos vecinos del pueblo, que en ese momento se encontraban en las inmediaciones, al escuchar gritos y alboroto acudieron al lugar donde se había producido el altercado. Algunos de ellos, al ver lo sucedido fueron los que primero alertaron a la Guardia Civil.
Aunque gran parte de los vecinos se encontraban en la discomóvil, en el pabellón municipal, al enterarse de lo ocurrido acudieron al lugar de la pelea alertados por el tumulto. Tras lo ocurrido, "la noche se enfrió para todo el pueblo", aseguraban las fuentes consultadas.
El Periódico de Aragón (18-8-2019)
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