Ermita de la Virgen de Illescas

Situada a las afueras de Calatayud, junto a la antigua carretera de Madrid a Zaragoza, en el paraje del mismo nombre, solo conserva la imagen titular obra muy popular.

Su origen estriba en la promesa de unos mercaderes de Illescas (Toledo), que se vieron asaltados por unos malhechores. En 1826 fue arruinada en su mayor parte para construir la carretera, y posteriormente sufrió numerosas reparaciones a causa de los destrozos ocasionados por accidentes. Finalmente, a mediados de los años 90, la ermita original (en una cueva) fue tapiada y se construyó otra, de nueva planta, justamente al lado del lugar que ocupaba la anterior.