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| CONTAMINA |
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Una de las calles de la localidad
En ruta por la antigua carretera general de Zaragoza-Madrid, al poco de pasar Alhama de Aragón, a la derecha, se tiende en la llanura el humilde núcleo urbano de Contamina, agrupado en torno a una calle principal que lo vertebra y que sin duda fue camino Real, bautismo que se conserva en nuestros días.
Alrededor de un centenar de edificios componen el casco urbano. Casi todos ellos son de construcción modesta. También lo es el de la iglesia parroquial de San Bartolomé, construido a base de tapial y ladrillo; este último material fue utilizado tan sólo para enmarcar la puerta de entrada al templo, que se abre en arco de medio punto, bajo atrio, para configurar los aleros y levantar el segundo cuerpo de la torre, destinado a campanario. Es cuadrada y apenas sobresale unos pocos metros de la cubierta del templo. Tiene remate triangular, con tejado a dos aguas.
La iglesia es de estilo barroco, de una sola nave cubierta con bóveda de lunetos. El retablo mayor, único interesante, está formado por ocho tablas que reproducen estampas de la historia del santo titular, San Bartolomé, obra del siglo XVI, de escuela aragonesa.
El edificio luce encalado en su exterior, incluso la torre, con excepción del cuerpo de ladrillo donde se alojan las campanas, en sendos vanos con arco de medio punto. (Alfonso Zapater)
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