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Alhama de Aragón
De Alhama de Aragón a Cetina
La vida es corta para vivir mal. Eso ya lo sabían nuestros abuelos cuando se acercaban a estas tierras para tomar sus aguas... Eso ahora que se llama el turismo wellness.
Por esto salimos de conocer el lago termal Alhama de Aragón donde se puede disfrutar de los manantiales de aguas termales que tantos curiosos atrae. En la antigüedad se conocía esta ciudad como Aquae Bilbilitanorum (agua de los bilbilitanos) pero los musulmanes lo cambiaron por su actual nombre: Alhama que significa baños. Las aguas naturales alcanzan los 34 grados y no dejan indiferente a ningún visitante.
Así que, a tan sólo 20 minutos encontramos una de los pueblos de paso del Cid, tal y como relata el Cantar. La tierra de doña Esperanza de Mendoza quien se casó con Francisco de Quevedo, escritor declarado enemigo del matrimonio que al poco tiempo se separó y del que se cuentan anécdotas - en esta tierra - que merecen atención mientras camina por el castillo / palacio de Cetina del siglo XIII. Puede que uno de los encantos de Cetina sean sus callejuelas vigiladas por las casas de dos alturas y sus tintes barrocos como el de la iglesia del pueblo.
Marca (27-6-2017)
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