La Comarca de Calatayud
Archivo Bibliográfico - Enciclopedia - Directorio de Empresas - Páginas de Calatayud - Noticias - Tienda - Foro - Tablón de Anuncios

Inicio/ Noticias de Calatayud

Páginas de Calatayud
GEOGRAFÍA E HISTORIA
PATRIMONIO ARTÍSTICO Y MONUMENTAL
LITERATURA
FERIAS, FIESTAS, TRADICIONES
ARTE Y ARTISTAS
BIOGRAFÍAS
TURISMO
HOTELES Y RESTAURANTES
VIAJES
ECONOMÍA
DATOS ESTADÍSTICOS
INDUSTRIA Y COMERCIO
ADMINISTRACIONES PÚBLICAS
SALUD
DEPORTE
TRABAJO
ENSEÑANZA
INFORMÁTICA
ASOCIACIONES Y COLECTIVOS
MEDIOS DE COMUNICACIÓN
VARIOS

Búsqueda de información
Google
PUBLICIDAD

Semblanza bio-bibliográfica de Baldomero Mediano y Ruiz de Torremilano (1847-1893)

FRANCISCO TOBAJAS GALLEGO


BIOGRAFÍA

Baldomero MEDIANO Y RUIZ nació el 10 de septiembre de 1847 en Paracuellos de la Ribera (Zaragoza), siendo bautizado al día siguiente en la parroquial de San Pedro Apóstol. La partida de bautismo, firmada por mosén Gaspar Gumiel en el Libro VIII, folio 58 r., señala que se le puso por nombre Jacinto Baldomero y que era hijo de Joaquín Mediano, médico cirujano del pueblo, y de Francisca Ruiz, residentes en Paracuellos de la Ribera. Sus abuelos paternos fueron Joaquín Mediano e Isabel Jordán, parroquianos de San Felipe de Zaragoza, y maternos Telesforo Ruiz de Torremilano y Brígida López, vecinos de Molina de Aragón y parroquianos de San Gil. Actuó de padrino su tío Lucas Mediano. En los libros parroquiales de San Gil, de Molina de Aragón (Guadalajara), encontramos el acta de bautismo de al menos ocho hijos del matrimonio Ruiz López, entre 1815 y 1836. La única hija del matrimonio, llamada Benita, nació en 1822. El padre, Telesforo Ruiz de Torremilano, era hijo de Nicolás Ruiz de Torremilano, de Molina, y de Bernarda Herranz, de Villar de Cobeta. La madre, Brígida López, nacida en 1797 y parroquiana de San Gil, era hija de Antonio López, de Molina, y de Ángela Soriano, de Motos.

Vicente DE LA FUENTE, en su Historia de Calatayud (1881), nombra a Joaquín Ruiz de Torremilano como componente del Consistorio de Calatayud en marzo de 18161.

En los libros parroquiales de San Felipe de Zaragoza se encuentran las actas de bautismo de Joaquín Mediano Jordán, del 11 de marzo de 1820, y de sus hermanos Lucas, nacido en 1823, padrino de Baldomero MEDIANO Y RUIZ, María, nacida en 1826, y de Gregoria, nacida en 1829.

En la Historia de la Universidad de Zaragoza (1869), de Jerónimo BORAO, se dice que José Mediano era entonces conserje y Lucas Mediano bedel primero2. En un anuncio publicado el 2 de febrero de 1881 en el Diario de Avisos de Zaragoza, se anunciaba que el ponche de ron de la bodega del Jalón, tónico digestivo, se servía en los cafés La Iberia, Fonda de Europa, Londres, Matossi, París y Suizo. Y las botellas a 12 reales se vendían en los establecimientos La Oriental, Coso 58, en la droguería del señor Mediano, frente a San Gil, y en la tienda del señor Berge situada en los porches del Paseo. En La Comarca, diario liberal de Calatayud, se anunciaba en 1886 el profesor Félix Mediano, que se ofrecía en la plaza del Carmen para contable y para dar lecciones en su casa o a domicilio. En la Guía de Zaragoza para 1860 se cita al habilitado Francisco Mediano, con domicilio en la Universidad, que cobraba de Tesorería los sueldos de los empleados de instrucción pública.

En la parroquial de Paracuellos de la Ribera se encuentran las actas de bautismo de los otros hijos del matrimonio Mediano Ruiz. En 1849 nacerá Isabel Nazaria, muerta en 1851, Pedro José que nació en 1851 y murió en 1855, Isabel, nacida en 1852, y Moisés Baldomero, nacido en 1857, en cuyo bautismo actuó de padrino Balbino García, médico de Morés. Joaquín Mediano Jordán morirá en Paracuellos de la Ribera el 6 de noviembre de 1863, de mal vertebral de Pott o tuberculosis vertebral. Francisca Ruiz de Torremilano falleció en Paracuellos de la Ribera el 14 de junio de 1891, a causa de una gastroenteritis.

Baldomero MEDIANO Y RUIZ fue abogado, funcionario de la Diputación Provincial de Zaragoza y director de su Boletín Oficial. En la sesión pública ordinaria de la Diputación de Zaragoza del 12 de diciembre de 1877, se proponía el nombramiento de un empleado que estuviera al frente del Boletín, para ocuparse de la parte administrativa y de la económica, proveyéndose esta plaza por oposición. A la vez sería director del Boletín Oficial y encargado de la impresión de la Biblioteca de Escritores Aragoneses, fijándose su sueldo en 1.750 pesetas. En la sesión pública del 18 de febrero de 1878, se proponía una terna formada por Baldomero MEDIANO Y RUIZ, Clemente HERRANZ y Manuel Lascorz y Servete, procediéndose al nombramiento por papeletas. De los 17 posibles, MEDIANO recibió 15 votos y 2 solamente HERRANZ.

El domingo 6 de octubre de 1878 aparece en Zaragoza el primer número de la Revista de Aragón (1878-1880), figurando como primer director de la publicación Baldomero MEDIANO. Entonces la administración de la revista se encontraba en la calle de San Félix, número 2. Primero fue un semanario de Ciencias, Literatura y Artes, luego de Ciencias, Letras, Artes e Intereses Generales, y al final de su corta andadura, quincenario con el rótulo de Ciencias, Letras y Artes. El 29 de diciembre de 1878 pasa a ser director de la revista Mariano de CÁVIA, el 21 de septiembre de 1879 figuran como directores-fundadores Baldomero MEDIANO y José María MATHEU, que ya huérfano había vivido con sus abuelos en la calle de San Félix, número 7, y a partir de junio de 1880 figura como director de la publicación Fermín HERRAN, aunque la redacción, compuesta por Baldomero MEDIANO, José María MATHEU, Mariano de CÁVIA y Valentín MARÍN Y CARBONELL, seguía en Zaragoza, en la calle de Torresecas, número 5, domicilio de MEDIANO.

Casi todos los números de la Revista de Aragón se imprimieron en los talleres del Hospicio Provincial, institución benéfica de la Diputación de Zaragoza. Cuando pasa a ser quincenario se editaría en la Imprenta de Timoteo Arnaiz, de Burgos, y luego en la Imprenta de M. G. Hernández, de Madrid. La Revista de Aragón fue "un empeño voluntarioso y provinciano, aquejado de permanentes problemas de tesorería (...)"3. En el pórtico de su primer número se participaban sus propósitos: "Contribuir con nuestro óbolo a la regeneración artístico-literaria que en nuestro país se inicia, y a la defensa de toda idea generosa y de cualquier útil innovación, proporcionando un medio más de lucir sus facultades a ingenios ya probados o a una entusiasta juventud, tales son, en resumen, nuestros propósitos. En este terreno hemos pedido y continuaremos pidiendo el apoyo de la inteligente mayoría que ha visto con profunda pena y noble sentimiento, la indiferencia y abandono que han ido unidos, hasta hoy, a toda tentativa aragonesa.

También hemos de hacer presente que el esfuerzo individual o de algunos pocos, por muy poderoso que sea, no edificará nada sólido ni durable, mientras no se vea secundado por la opinión pública, por esa mayoría selecta de que hablamos, y por aquellos que son en el país la representación de sus fuerzas vivas y sociales". La Revista de Aragón, que surgió en un momento idóneo para promover los intereses regionales y para crear una conciencia aragonesista fue "una empresa cuyo extenso plantel de colaboradores no oculta, sin embargo, su endeblez fundamental: tras ella no hay, en efecto, ni una conciencia de grupo activo y seguro de sí, ni una institución sólida, ni siquiera una expectativa pública cuantiosa que estimulara la coherencia y el rigor que la redacción no encontraba en sí misma. No existe grupo homogéneo porque no llegan a serlo esa nómina de meritorios de periodista, funcionarios provincianos, docentes universitarios, abogados y hasta estudiantes que redactan la revista y que suscriben los vaguísimos y bienintencionados propósitos que se estampan al frente de cada una de las tres etapas de la publicación. No hay vigor institucional tras ella porque difícilmente podía aportarlo una universidad anémica, la benevolencia de una Diputación Provincial o un Ateneo de azarosa historia. No había público que sustentara con holgura esta empresa, igual que no lo hubo para dar continuidad a la coetánea Biblioteca de Escritores Aragoneses que, pese al patrocinio oficial, languideció hasta más allá del fin de siglo o como no lo hubo para tener en pie la renacentista Casa de Zaporta o la mudéjar esbeltez de la Torre Nueva"4.

La Revista de Aragón nació al mismo tiempo que lo hizo el Círculo Literario del Casino Principal (1878-1880) y desapareció cuando el Ateneo Científico, Literario y Artístico de Zaragoza (1880-1896), que llevaba los mismos apellidos de la revista, comenzó a funcionar. En ella los conferenciantes publicaron sus discursos, sirviendo de albergue a los ateneístas hasta 1880 y de "órgano oficial" al Círculo hasta la fundación del periódico La Derecha (1881-1901)5. Joaquín GIMENO FERNÁNDEZ-VIZARRA (1852-1889), socio fundador del Ateneo y del periódico político La Derecha, escribe en '¡Vamos muy despacio!': "Nació el citado "Ateneo" por impulso indirecto que le comunicaron desde el salón colorado del "Casino Principal" Mario de la Sala, José Manuel Piernas y Faustino Sancho y Gil, quienes provocaron por entonces una serie de memorables conferencias literarias y científicas, que se celebraron en dicho centro de recreo, y a las cuales asistía reducido número de socios"6.

El la Revista de Aragón escribió MEDIANO amenas crónicas de actualidad, una novela de viajes exóticos titulada 'Siete días en Annam', poemas patrióticos, traducciones de Víctor HUGO, de SOULARY y de 'La Divina Comedia', rimas de inequívoco sello becqueriano y trabajos que versaban sobre el ferrocarril de Canfranc y sobre las fuentes de conocimiento y método de enseñanza en las asignaturas de Geografía e Historia Universal, a la usanza de los opositores de la época. Con el seudónimo de Valerio firmó comentarios de libros, críticas de espectáculos, narraciones, como "Estética de las flores", de su libro inédito 'Ecos de un jardín', y "De verano. Historia de unos amores", y un estudio histórico sobre el Mediterráneo. MEDIANO participó en el banquete ofrecido por los periodistas aragoneses a Concepción GIMENO, donde improvisó una quintilla tras los postres. Este acto viene reseñado en el número del 30 de abril de 1880 de la Revista de Aragón.

En el Certamen Literario celebrado en el Paraninfo de la Universidad de Zaragoza el 25 de mayo de 1881, para conmemorar el II Centenario de la muerte de CALDERÓN, Baldomero MEDIANO fue premiado con un medallón, regalo del Centro Mercantil, Industrial y Agrícola, por un trabajo que versaba sobre los Autos sacramentales de CALDERÓN. De este trabajo opinó SANCHO Y GIL: "El trabajo es la obra gallarda de un literato de conocimientos de buen cuño, de un escritor de bellísimas formas, y en todas sus páginas atestigua que su autor ha meditado con fruto lo mucho que ha leído, no en buenos libros, sino en los mejores libros"7. Por entonces MEDIANO colaboraba en el Diario de Zaragoza, en unas interesantes páginas literarias que se publicaban los domingos. En enero de 1881 se publicaba en este diario el folletín 'Lo bueno que se ha dicho de las mujeres', de Emilio DESCHAMEL, en la versión española de Baldomero MEDIANO.

Ya el 13 de febrero de 1881, por invitación de Baldomero MEDIANO, se habían reunido en la redacción del Diario de Zaragoza, cuyo director había sido nombrado individuo de la Comisión designada por los representantes de la prensa de Madrid para entender de los trabajos del Centenario de CALDERÓN, los directores de los periódicos de Zaragoza y un numeroso grupo de personas influyentes de la sociedad local, entre los que aparecían Faustino SANCHO Y GIL, Rafael VALENZUELA, Marceliano ISÁBAL, Desiderio DE LA ESCOSURA, José Manuel PIERNAS y Mario DE LA SALA.

MEDIANO escribió además numerosos y variados títulos, para que sirvieran de libros de texto en los centros docentes. Sabemos que colaboró también en La Iberia, diario progresista madrileño (1854-1898), el 28 de abril de 1880, con la crítica al libro 'Historia política y literaria de los trovadores'8, de Víctor BALAGUER, y en 1886, en el número V de La Ilustración Zaragozana, Enciclopedia de Ciencias, Letras y Artes, con la poesía "Afinidades secretas".

MEDIANO fue hombre de Ateneo. Fue vicepresidente de la Sección de Literatura y Artes en los cursos 1883-1884, 1884-1885 y 1885-1886, como así nos lo confirman los certámenes científicos y literarios convocados por esta entidad en 1884, 1885 y 1886. En el de 1884, MEDIANO fue secretario del Jurado calificador y en el de 1886, miembro del Jurado. En la conmemoración del centenario de la muerte de Bartolomé LEONARDO DE ARGENSOLA, en febrero de 1882, MEDIANO leyó una memoria titulada "Juicio crítico del poeta". También participó en el homenaje ofrecido por el Ateneo de Zaragoza a José ZORRILLA, el 25 de mayo de 1883, y en el ofrecido a Víctor HUGO, pocos días después de su muerte, acaecida el 22 de mayo de 1885. En esta sesión necrológica celebrada el 12 de junio, MEDIANO leyó un estudio crítico del poeta. El 7 de noviembre de 1884, Baldomero MEDIANO, entonces vicepresidente de la Sección de Literatura y Artes del Ateneo, pronunció un discurso inaugural titulado "Elogio del dramaturgo García Gutiérrez", que había muerto el 26 de agosto de aquel mismo año. Parte de este discurso se publicó el día 15 de noviembre en el Diario de Avisos. En él recordaba MEDIANO la preferencia de GARCÍA GUTIÉRREZ por los temas aragoneses. "Bien sea honrada gratitud al país que le dio argumento y ocasión en 'El trovador' para revelarse como escritor de dotes excepcionales, o bien a causa de la simpatía que nuestros héroes y grandezas inspiraron a su ardiente fantasía, a su corazón, siempre accesible a los sentimientos patrióticos y liberales, ello es que la historia y tradiciones aragonesas juegan un papel muy principal en las producciones de este autor y son las que han inspirado todas sus obras maestras". El 2 de diciembre de 1885, MEDIANO, vicepresidente de la Sección de Literatura y Artes, inauguró las sesiones del nuevo curso 1885-1886 del Ateneo, con un discurso que versaba sobre la influencia del espíritu nacional y patriótico en las literaturas, que no conservó su autor.

En 1881 firma el prólogo al libro 'Poesías líricas', de su amigo Valentín MARÍN Y CARBONELL, que está dedicado a su tío Víctor BALAGUER (1824-1901). MARÍN, aunque nacido en Barcelona, durante una larga estancia de sus padres, se sentía aragonés. Había estudiado en el Colegio de Valldemía de Mataró con Faustino SANCHO Y GIL. El 31 de enero de 1879 estrenó en el Teatro Principal de Zaragoza su primer drama 'O mártir o criminal', que antes había leído ante SANCHO Y GIL, Eugenio Escartín y el actor Miguel Cepillo, que decidieron llevarla a los ensayos. Esto lo cuenta SANCHO Y GIL en un artículo publicado en el Diario de Avisos, al otro día del estreno. En la crónica semanal del 2 de febrero de la Revista de Aragón, Juan Pedro BARCELONA escribía que el drama de MARÍN "era la protesta vigorosa contra el adulterio y la disipación del marido, ya que apenas se cuida nadie sino de condenar las faltas de la mujer.

Con el joven autor del nuevo drama, o mejor dicho con el pensamiento de la obra, estaban conformes no sólo las mujeres todas sino también todos aquellos hombres que ven con pena caer sobre la débil mujer, entregada poco menos que inerme a las asechanzas sociales, repetidos anatemas en que entra por más que la moral, la hipocresía, mientras iguales delitos no alcanzan una palabra de censura en el hombre, aun siendo tan frecuentes que pasan como moneda corriente".

De 1884, año de la marcha de MARÍN a Madrid, data su obra 'El puente de Alcudia. Poema de dolor. A la Guarnición de Zaragoza'. Gran parte del grueso tomo de 'Poesías líricas', ya se habían publicado en la Revista de Aragón. MEDIANO escribía en el prólogo: "El verso alguna vez poco correcto, pero siempre fluido y cadencioso de Valentín Marín, deja siempre ver al través de su lujosa y asiática difusión, el fondo del alma del poeta". En ella se agitaban todos sus sentimientos, "el optimismo nada hipócrita del poeta, que contrasta con el desfallecimiento, la duda o incredulidad, el hastío y la desesperación que se revelan en las producciones de nuestro siglo, y que demuestran que aún son muchos los que siguen las desconsoladoras huellas de Lord Byron". MEDIANO creía que el tiempo y la práctica pondrían límite a la prodigalidad poética de MARÍN, a la orgía de inspiración del poeta, como la calificaba SANCHO Y GIL, que publicó una crítica del libro en cinco entregas, del 12 al 16 de abril de 1881, en las páginas del Nuevo Avisador de Zaragoza, donde se agrupaban los republicanos de CASTELAR. SANCHO Y GIL aseguraba que la afición de MARÍN a la poesía, provenía de la lectura de los grandes escritores de los siglos XVI y XVII, pero sobre todo de BÉCQUER. Y añadía, refiriéndose al autor: "Nació poeta: no ha pensado en hacerse gran poeta". Y finalizaba: "Baldomero Mediano ha dicho sobre los quilates de los versos publicados, cuanto su hermoso criterio y ático gusto le dictaron, en un prólogo, que en un estilo fácil contiene profundas observaciones críticas y ocurrencias eruditas muy felices".

MEDIANO firmaba el 21 de diciembre de 1882 y en Zaragoza, el excelente prólogo del Tomo IV de la Sección Histórico-doctrinal de la Biblioteca de Escritores Aragoneses, que correspondía a la 'Historia de las guerras civiles de España (de 1700 a 1708)', de Agustín LÓPEZ DE MENDOZA Y PONS, conde de Robres, editado en 1882. El conde de Robres había dejado inconclusa su historia en el libro noveno, en el año 1709. A su muerte el libro pasó a su hija María Josefa Mendoza Pons y Bournonville, madre de Pedro Pablo Abarca de Bolea, X conde de Aranda, cuya viuda lo regaló a Joaquín Morales, coronel de guardias. En 1845 lo compró el escritor Antonio FERRER DEL RÍO, quien a su vez lo regaló a Próspero de BOFARULL en 1851, quien lo cedió a su hijo Manuel de BOFARULL, por entonces jefe del Archivo de la Corona de Aragón. En él, MEDIANO tachaba a Carlos II de rey "degenerado e imbécil", que murió sin descendencia el 1 de noviembre de 1700, entre las imágenes de las Vírgenes de la Almudena, de la Soledad y la de Atocha, y las reliquias de San Isidro y San Diego de Alcalá. MEDIANO apuntaba que el duque de Abrantes salió al dintel y dirigiéndose al embajador de Austria, le dijo: "Tengo el placer, mi buen amigo, y la satisfacción más verdadera en despedirme para siempre de la ilustre casa de Austria". MEDIANO escribía con ironía que "toda catástrofe o convulsión política en España tiene, por lo común, un prólogo cómico". MEDIANO era bastante crítico con Carlos V, el primer Austria, y con Felipe V, el primer Borbón, de "carácter débil, mujeriego e irresoluto", que "gobernaron el reino sin más consideraciones que las que a un país conquistado por la fuerza de las armas se tendría". Con Felipe II era demasiado condescendiente, pues escribía que aunque el monarca se mostró inflexible con Lanuza y con los nobles fueristas, "no pensó nunca en abolir los fueros que eran dádiva de sus predecesores en el trono de Aragón, y que él mismo había jurado conservar". MEDIANO olvidaba que Felipe II, en las Cortes de Tarazona de 1592, recortó algunos de los fueros y privilegios aragoneses. Del primer Borbón Felipe V, MEDIANO escribía: "trató a nuestro antiguo reino como país de conquista (...). Suprimió los brillantes testimonios del heroísmo de nuestros mayores, y derogó despótica y arbitrariamente las libertades que tanto habían contribuido a la grandeza y florecimiento de Aragón".

El 27 de julio de 1893 se publicó en el Diario de Zaragoza una carta de Ángel Liñán, fechada el pasado 24 de julio en Paracuellos de la Ribera. En ella notificaba el fallecimiento de Baldomero MEDIANO el día anterior. "Ni los auxilios de la Ciencia, ni los cuidados de una esposa solícita y cariñosa, esclava del deber, que supo hacerse superior a su acerbo sufrimiento, bastaron a combatir aquella cruel enfermedad adquirida en el trabajo y agrandada por el insano clima de los trópicos.

¡Pobre Baldomero! La muerte le ha sorprendido joven, en su tierra, a orillas del Jalón famoso, como él decía, y en edad en que podía esperarse de su ingenio los mejores y más sazonados frutos. Paréceme que aún le veo referirme con cariñosa complacencia las vicisitudes de su vida, sus luchas en el periódico, sus lauros en el certamen. Aún creo que le contemplo cuando, sintiendo una amistad que el tiempo ni la ausencia pudieron extinguir, alegrábase su corazón al recordar los nombres de Matheu, el novelador pulcro y elegante; de Marín, el vate fecundísimo; del malogrado Arnau, pensador profundo; de Zapata, el genial poeta; de Cavia, el saladísimo y original cronista, y de otros y otros que con él contribuyeron a elevar el renombre literario de esta tierra idolatrada. Todavía se agitaba en su pecho la esperanza, y bullían en su cerebro las ideas, y ambicionaba nuevos triunfos literarios, creyendo ¡pobre! lejana la última hora de su vida, e ignorando que la Providencia le reservaba la cuna para su sepulcro, aquí, en el sitio donde moran los restos de seres que le fueron tan queridos.

Descanse en paz el distinguido literato e incansable polemista; el amigo de corazón sano y de trato cariñoso. Yo, que quisiera poseer en este instante la claridad de su talento y la brillantez de su pluma, sólo puedo rendirle homenaje de acendrado cariño, vertiendo una lágrima en su memoria".

Al día siguiente se publicaba una esquela. Por ella sabemos que MEDIANO había ocupado el cargo de administrador de Hacienda de Visayas, en Filipinas. También se citaban a sus deudos, su esposa Josefa Castro, su hermano Moisés, hermanos políticos, tíos, sobrinos y demás parientes. En el mismo diario aparece el 12 de septiembre una noticia referida a Baldomero MEDIANO. En los talleres de mármoles de los Sucesores de López y Compañía se había grabado una lápida de mármol negro para cubrir su sepultura, con una dedicatoria que perpetuaría la memoria del que fuera director del Diario de Zaragoza. Decía así: "Aquí yace Baldomero Mediano y Ruiz de Torremilano, poeta laureado y escritor insigne. Fue uno de los más preclaros iniciadores del renacimiento literario en Aragón. Falleció en Paracuellos de la Ribera el 22 de julio de 1893, a los 45 años". Su partida de defunción, que se encuentra en el Libro XI, folio 190 v., de la parroquial de Paracuellos de la Ribera, debida al licenciado Joaquín Sánchez, dice que MEDIANO murió el 23 de julio de 1893 de médula espinal. Estaba casado con Josefa de Castro, natural de Monzón. Al día siguiente se le dijo misa de cuerpo presente, siendo enterrado en la ermita de San Roque, contigua al cementerio del pueblo.

BIBLIOGRAFÍA

La floresta de la infancia. Colección dedicada a los niños de cuentos morales, leyendas, poesías, fábulas y lecturas útiles y recreativas, Imp. de J. Limia y G. Urosa, Madrid, 1871.
Biblioteca Nacional, Madrid.

La floresta de la infancia. Colección de cuentos morales, leyendas, poesías, fábulas y lecturas útiles y recreativas dedicada a los niños, Librerías de educación de D. Manuel Rosado, Madrid, [s.a.]
Biblioteca Antonio Utrera, Calatayud (Zaragoza).

"¡Aragón!", oda premiada y publicada en el Certamen Poético celebrado el 19 de octubre de 1872 en las Fiestas de Zaragoza dispuestas con motivo de la conclusión de las obras y consagración del Templo del Pilar, Tip. de Calixto Ariño, Zaragoza, 1872.
Biblioteca Universitaria, Zaragoza.

El camino de la vida; curso completo de educación física, moral e intelectual, Madrid, 1872.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Nociones de Física y Química, Madrid, 1874.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Nociones de geometría práctica y aplicada a la agrimensura, al dibujo y a las artes en general..., Madrid, 1874.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Nociones de física y química: acomodadas a la capacidad de los niños, dispuestas para servir de texto en las escuelas normales, Librería de Educación de M. Rosado, Imp. de J. Limia y G. Urosa, Madrid, 1874.
(Catálogo colectivo del patrimonio bibliográfico español).

Manual de estilo epistolar o novísimo secretario universal. Modelo de cartas familiares, de felicitación, de pésame, suplicatorias, de recomendación, amorosas, comerciales, billetes de convite y despedida, etc., y formulario de documentos de uso frecuente, como solicitudes, recibos, pagarés, oficios, contratos, etc., edición de 1875.
(Catálogo de las obras que se hallan de venta en la casa Editorial de Luis de Diego, Madrid, 1877).

El último Almanaque festivo-literario..., publicado por..., M. Rosado, Madrid, 1877.
Biblioteca Nacional, Madrid.


Compendio de la Historia de España, 1878.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Conferencias sobre la pluralidad de mundos, por Fontenelle, traducidas y aumentadas con un prólogo y notas por..., Madrid, 1879.
(Anuncio en la Revista de Aragón. 8-6- 1879).

El vergel de las niñas. Colección de cuentos, 2ª ed., Madrid, 1879.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Ídem, 7ª ed., Madrid, 1907.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Ídem, 9ª ed., Madrid, 1911.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Ídem, Nueva edición, Madrid, 1918.
Biblioteca Nacional, Madrid.

MARÍN Y CARBONELL, Valentín: Poesías líricas, con un prólogo de..., Imprenta del Hospicio, Zaragoza, 1881.
Biblioteca Universitaria, Zaragoza.

Leyendas Católicas basadas en el texto de la Sagrada escritura, Librería de Juan y Antonio Bastinos, Barcelona, 1881. Prólogo de José María Matheu y Aybar.
Biblioteca-Museu Víctor Balaguer, Vilanova i Geltrú (Barcelona).

"Los autos sacramentales: su significación literaria". trabajo premiado y publicado en el Certamen Literario para celebrar la muerte de Calderón, que se celebró el 25 de mayo de 1881 en el Paraninfo de la Universidad de Zaragoza, Tip. del Hospicio, Zaragoza, 1881.
Biblioteca Universitaria, Zaragoza.

LÓPEZ DE MENDOZA Y PONS, Agustín (conde de Robres): Historia de las Guerras Civiles de España (de 1700 a 1708), Tomo IV de la Sección histórico-doctrinal de la Biblioteca de Escritores Aragoneses, prólogo de..., Hospicio Provincial, Zaragoza, 1882.
Biblioteca Universitaria, Zaragoza.

Compendio de la Historia Sagrada, 3ª ed., Madrid, 1882.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Ídem, 9ª ed., Madrid, 1904.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Compendio de historia sagrada: destinado a servir de texto explicativo a la colección de láminas publicadas por Manuel Rosado y escrito por..., Librería de Educación de Manuel Rosado, Imp. del Centro Bibliográfico, Madrid, 1882.
(Catálogo colectivo del patrimonio bibliográfico español).

El vergel de los niños. Colección de cuentos morales, leyendas, poesías, fábulas, etc., 3ª ed., M. Lib. de Educación de D. Manuel Rosado, Madrid, 1883.
(Citado por PALAU).

Las glorias de los humildes. Proverbio moral en dos cuadros y en verso para ser representado por niños, Barcelona, 1888.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Los albores de la infancia. Colección de cuentos morales dedicados a los niños por... Nueva edición considerablemente aumentada por el autor, Sucesores de Hernando, Madrid [s.a.]
Biblioteca Nacional, Madrid.

Ídem, 15ª ed., Madrid, 1906.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Ídem, Nueva edición, Madrid, 1918.
Biblioteca Nacional, Madrid.

El Faro de las niñas. Colección de cuentos morales, 19ª ed., Madrid, 1905.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Ídem, 20ª ed., 1908.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Ídem, 21ª ed., 1911.
Biblioteca Nacional, Madrid.

El Faro de las niñas. Colección de cuentos morales dedicados a las niñas... Nueva edición, Madrid, 1915.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Ídem, Nueva edición, Madrid, 1919.
Biblioteca Nacional, Madrid.

Ídem, Nueva edición, Suc. de Hernando, Madrid, 1923.
Biblioteca Nacional, Madrid.

NOTAS

1. Vicente DE LA FUENTE: Historia de la Siempre Augusta y Fidelísima Ciudad de Calatayud, edición facsímil del C.E.B., I.F.C., Zaragoza, 1988, tomo II, p. 541.
2. Jerónimo BORAO: Historia de la Universidad de Zaragoza, edición facsímil de Mira Editores, Zaragoza, 1987, p. 210.
3. José Carlos MAINER: "Sobre la Revista de Aragón (1878-1880)", Instituto de Estudios Turolenses, Zaragoza, 1989, p. 4.
4. Ibídem, p. 9.
5. Francisca SORIA ANDREU: El Ateneo de Zaragoza (1864-1908), I.F.C., Zaragoza, 1993, p. 48.
6. Joaquín GIMENO Y FERNÁNDEZ-VIZARRA: ¡Vamos muy despacio!, edición facsímil El Día de Aragón, Zaragoza, 1986, II, p. 130.
7. Certamen literario celebrado en Zaragoza el 25 de mayo de 1881, Tip. del Hospicio, Zaragoza, 1881, p. XXIX.
8. Seis volúmenes, Imprenta de Fortanet, Madrid, 1878-79. Complemento de esta obra fue el libro de Celestino PUJOL Y CAMPS, Índice general alfabético de las cosas más notables contenidas en la obra "Historia de los trovadores" del Excmo. Sr. D. Víctor Balaguer, Impr. y Fund. de M. Tello, Madrid, 1883. En Enrique MIRALLES: Cartas a Víctor Balaguer, Puvill Libros, Barcelona, 1995. En la Revista de Aragón se publicaron varios capítulos del libro: "Guillermo Rudel", 17-8-1879, "Guillermo Cabestany", 24-8-1879, "Guillermo de Montagnagout", 31-8-1879 y 7-9-1879, y "Leonor de Aquitania", del 17-9 al 19-10-1879.

Altas/Modificaciones - Contacto - Información
© Calatayud.org 1999-2011