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Enviado el: 12/06/2005 12:22:58
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Los huevos de Agag y Briatore
por Paloma Barrientos
Domingo, 11 de junio de 2005
Aquella noche, en el restaurante Lucio había mucha 'pomada'. Para quien no esté al tanto, este término no es otra cosa que el chismorreo puro y duro referido a personajes poderosos e influyentes (banqueros, empresarios, políticos...) y sus situaciones personales que poco tienen que ver con opas, remodelación de consejos de administración, stock options, etc., etc., y sí más con adulterios, traiciones empresariales, hijos secretos -está a punto de saltar la chispa sobre un caballero que se hizo millonario en la época del pelotazo y que no quiere asumir su paternidad-, abandonos conyugales por salidas de armario... Es el caso de un señor casado con una elegante ‘oficial’ que ha decidido ser feliz con su nueva y estrenada sexualidad. Concluyendo: ‘estar en la pomada’ es idéntico a dominar los cotilleos de los reality televisivos, pero con protagonistas del establishment.
Hecha la aclaración, volvemos a situarnos en el escenario inicial y les desvelo que los comensales son Ana Botella, Alejandro Agag y Ana Aznar, que alumbrará su segundo hijo casi al tiempo que doña Letizia. Recuerden que su enlace en el Monasterio del El Escorial fue definido -por los fastos y el boato- como la ‘Boda de la tercera Infanta’. Codo con codo, se encontraban Tito Pajares y su chica. Tito es dueño de la discoteca que el matrimonio Agag-Aznar cerró para celebrar su despedida de solteros. La guinda de la mesa fue... sorpresa, sorpresa... (no, no era Isabel Gemio, como puedan pensar): Flavio Briatore, el máximo responsable del equipo Renault de Formula1. El jefe de Fernando Alonso estaba acompañado de la que, supongo, es su última conquista. Una espectacular señorita, casi tan espléndida como la muchacha que fue su pareja en la boda de El Escorial. El paseo de esa dama sin nombre por el pasillo central del Monasterio ataviada con un minivestido de encaje dorado dejó traspuestos a más de un invitado.
Dicen que el éxito de Briatore con las mujeres tiene mucho que ver, al margen de su generosidad, con su simpatía. Millonario de carrera, que no de nacimiento, fue vendedor de Benetton y de ahí y, poco a poco, se convirtió en lo que es ahora: un hombre influyente, siempre rodeado de bellezas oficiales -Naomi Campbell, Heidi Klum... - y desconocidas, que parece son las que menos guerra le dan.
Cenaron sin salirse del guión típico de la carta de Lucio: jamón, ensalada, huevos estrellados –algún día les contaré el secreto de este plato que me reveló el propio Lucio-, solomillo, merluza rebozada, pastelitos con nueces y arroz con leche. La factura la pagó el señor Pajares que le debió salir la cena por un ‘congo’.
Ante este petit comité surgen varias preguntas: ¿A qué se debía la reunión informal? ¿Dónde estaba el cabeza de familia, o sea, don José María? Por otro lado, la relación de Briatore y de Agag viene de lejos y se les ve mucho juntos. Como dato ilustrativo, el verano pasado el joven matrimonio pasó unos días en Costa Esmeralda ¿invitados? por Briatore y compartiendo con Alberto Cortina y otros mega ricos lujos y fiestas.
Tengo que preguntarle a Manolo Romero, periodista con chispa e imaginación, por qué los ricos son tan endogámicos y acaban siempre juntos y revueltos. Espero respuesta al tiempo que le felicito por la espléndida fiesta que montó para presentar la campaña de turismo de Canarias. Bajo el lema Te vas a enamorar, Manolo Romero consiguió que Carmen Sevilla fuera madrina del festejo en unos momentos difíciles para ella y cuando ya había tomado la decisión de no hacer declaraciones extra profesionales de ningún tipo. No hablará de Lola Flores, ni de su amante, ni responderá a los ataques de ‘La Camboria’, salvo en el Juzgado. La reunión fue un éxito, al igual que el homenaje que recibió Beatriz de Orleans en el Rincón de Goya. Allí, y de la mano de Alejandro Morales, se organizan los premios Las mujeres y el vino y en cada edición se premia a una mujer que haya publicado algún ensayo u obra literaria de interés. Pilar Medina-Sidonia, Nieves Herrero o María Teresa Álvarez han sido algunas de las galardonadas. La cena sirvió también para comentar lo que será el primer gran baile de la temporada con la asistencia de empresarios -Fernández Tapias, Cortina, Abelló... -, banqueros, títulos nobiliarios y algún que otro bufón de esos que siempre forman parte de las comparsas del poder y el dinero. La fiesta se celebrará en Biarritz con motivo del setenta cumpleaños de Joao Flores. Su mujer, Tita Torrabadella, piensa tirar la casa -en este caso el Hotel du Palais- por la ventana. Este establecimiento fue en su origen la residencia de verano de la emperatriz Eugenia de Montijo y ahora lugar de esparcimiento de ricos internacionales.
Cuentan que hay bofetadas por recibir la invitación y codearse con la ‘alta sociedad’. Muchos de ellos viajarán en sus aviones privados o con el chofer. Qué pena que los anfitriones no hayan contratado una flota de autobuses para el desplazamiento. ¿Se imaginan a Juan Abelló, por ejemplo, cantando rancheras, mientras Elena Cué o Alberto Cortina tocan la bandurria o el acordeón y la espléndida Alicia Koplowitz reparte blinis de caviar y salmón? La bomba.
¿Recuerdan que en la crónica anterior les hablaba de un caballero que regaló a su ex un singular reloj que emitía mensajes de amor y felicitaciones navideñas? El personaje no es otro que Carlos Larrañaga. El malvado y espléndido actor compró dos artefactos en una famosa tienda de decoración a razón de 56 euros la unidad. Uno de ellos, casualidades de la vida o misterios sin resolver, llegó al domicilio de María Teresa Ortiz-Bau. Lo curioso del aparato es que si uno mira fijamente la varilla superior del aparato acaba casi hipnotizado. Yo me quedé tan traspuesta que a punto estuve de gritar: Elvis Presley está vivo. |
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ATENEOS
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Enviado el: 13/06/2005 18:49:28
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Aznar se ha escabullido a su "catedra" en los EEUU, pues es de los que tiran la piedra y esconden la mano. Rato ha venido de paseo,a mostrar el palmito de señorito del FMI, demostrando lo poco que le importan las penalidades de sus comilitantes. Mayor Oreja hace mucho que no sabe/no contesta. Y aquí los que quedan son los insistentes. Desde el 11-M insiste en lo que ni él mismo se cree y en arrastrar al PP hasta los mismisimos infiernos. Zaplana insiste a pesar de las dificultades, a ver si finalmente cumple sus promesas y logra hacerse rico. Esperancita, insiste en hacer la Vuelta a España de pancartera mayor - que siga, que siga, y que nos deje tranquilos a los que vivimos en Madrid. Y finalmente Rajoy, que insiste en montar el circo aunque los enanos - Elorriaga incluido - insisten en crecer |
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