Ana Calahorra
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Enviado el: 07/08/2008 22:30:15
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Una mañana de Julio de este verano, Torrijo se despertó conmocionado por la dura noticia de un accidente de tráfico. Dionisio, su mujer Julia, su hija Mª Luz y su yerno habían muerto. Iban por la carretera circulando por su carril cuando se les vino encima en contra dirección el coche de otra persona que también murió.
Dionisio era un pequeño gran hombre, campechano y afable. Cuando mi padre falleció los ojos se le llenaron de lágrimas, los dos compartieron las penas y confidencias de ser huérfanos de esa terrible guerra civil en la que asesinaron a sus respectivos padres.
A Dionisio se le murió su madre cuando era muy pequeñito, pero ese hecho no movió la compasión de aquellos corazones fríos como témpanos de hielo que también mandaron fusilar a su padre Dionisio Vela Torrubia y lo peor de todo es que eso ocurría entre vecinos de su propio pueblo, vecinos que se habían olvidado del "respeto al derecho ajeno" y también de la máxima que dice " amaros los unos a los otros". Increíble pero cierto que en un pueblo pequeño, en esa guerra surgiesen muchas historias tan tristes como esta o incluso peores, Dionisio tuvo que crecer sin el cariño de unos padres.
El verano pasado como si presintiésemos que ya no nos íbamos a ver más, le pedí que me hablase sobre lo que ocurrió con su padre y él con su peculiar voz que aun resuena en mis oídos me contó su historia, la tenía grabada en las neuronas de su magnífica memoria, con espacios, puntos y comas, no le importaba repetirla las veces que hiciese falta. Julia su mujer le ayudaba a que no se dejase nada en el tintero. Cuando se explicaba se le notaba la respiración aliviada de poder hablar sin miedo después de tanto silencio y en sus ojos se veía la alegría rota de un inocente niño malherido pero a la vez la de un adulto fuerte y valiente curtido por los reveses de la vida.
Yo ya sabía de esas historias, por las cartas de mi abuelo Lucas desde la cárcel de Calatayud, en ellas él decía algunas cosas que yo no llegaba a entender; pero con las explicaciones de Dionisio y de algunas personas más todo cuadraba perfectamente. Era cómo un rompecabezas que empezaba poco a poco a recomponerse con todas sus piezas ante mis ojos y ante la historia.
Esas cartas de mi abuelo y las explicaciones de mucha gente como Dionisio fueron la chispa que hizo saltar mi curiosidad sobre esa guerra y casualidades o no de la vida, quien sabe, el día en que Dionisio murió acabé de completar esa lista de treinta y dos personas fusiladas en Torrijo y sí Dionisio tenías razón, como tú decías fueron treinta y dos, con sus respectivas historias.
Gracias a él supe que a mi abuelo podía haber sido fusilado en Cetina junto a su padre pues estuvieron casi un mes, juntos y maltrechos en esa cárcel de Calatayud. Siempre habíamos pensado que mi abuelo estaba en el Barranco de la Bartolina pero si fuera así en ese paraje después de la descomunal profanación que ha tenido lugar allí, sería más difícil de encontrarle, aunque quizás tampoco del todo imposible. Llevamos dos años hablando en este foro y allí sigue ese barranco solitario con sus dos pequeñas cruces. Ese barranco y las fosas de muchos pueblos de nuestra comarca están en la mente de muchas y muchas familias que están esperando que se acabe de romper el silencio y que puedan llegar a verlo.
Por muy poco tiempo quizás Dionisio no has podido ver como encontraban a tu padre, ni siquiera un pequeño homenaje en tu pueblo para esos hombres que defendieron la libertad de todos y con los que se cometió semejante injusticia, quizás lo vean tus hijos, tus nietos, tus biznietos. Quizás lo veas desde el cielo. Por lo menos has seguido de cerca su búsqueda y has visto cómo generaciones jóvenes se interesabann por tu padre, por mi abuelo y por todos y cada uno de aquellos hombres que aún no han tenido una justicia social.
Ahora contigo siento que tenemos más fuerza en el más allá, seguro que también desde allí arriba nos echarás una mano para seguir adelante. Gracias Dionisio por ayudarme, sé que me tenías cariño y yo a ti. Descansa en paz. |
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merche
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Enviado el: 08/08/2008 15:16:29
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T us palabras me han puesto los pelos de punta, habia oido de la trajedia ,pero con la historia que hay detras ,tan fuerte me uno a ti para rendir homenaje , a estas personas , a los que sufriron y a todos vosotros que teneis que vivir con esos recuerdos agridulces , agrios y amargos por las injusticias, y dulces por la grandeza y nobleza de vuestros familiares.. descanse en paz Dionisio y su familia, y un abrazo Ana por escribir algo tan amocionante.... con todo mi cariño me uno a ese pesar. |
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juan
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Enviado el: 08/08/2008 15:49:37
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Re: Re: Descansa en paz, Dionisio |
[Responder] |
Esta gente que va en sentido contrario no merece vivir, lo malo es que siempre se llevan a alguien por delante. Apuestas,bromas... es lo que va detrás de éstos actos tan brutales..Espero que no haya tenido ni entierro la persona que lo ha causado. Es una pena que se haya llevado a ésta familia por delante, y una alegría que haya muerto el causante. Es duro decir esto, pero es lo que se siente al leer estas cosas |
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