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José María Dara Sanz, IX Barón de Purroy,
héroe de los Sitios de Zaragoza
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SANTIAGO GIMENO VAL | La IX Baronesa de Purroy, María Luisa Zamora de Molina, se casó con José María Dara Sanz, con lo que éste se convirtió en IX Barón de Purroy consorte. De ese matrimonio nacieron dos hijos, Agustín que sería el X Barón de Purroy y María Luisa.
José María Dara Sanz, estaba en posesión del cargo de Regidor del Hospital Nuestra Señora de Gracia de Zaragoza durante el asedio francés a la ciudad, en los años 1808 y 1809 y también fue nombrado junto al Marqués de Fuenteolivar superintendente de los hospitales de campaña, por el intendente Calvo de Rozas.
José María Dara, también ostentó el título de Noble de Aragón y fue un hombre generoso que entre los servicios prestados, se distinguió de manera excepcional en el salvamento de los enfermos del Hospital Nuestra Señora de Gracia, bombardeado y destruido por las tropas francesas el día 3 de Agosto de 1808. Por este hecho el General Palafox le concedió el escudo de distinción.
Después del primer Sitio, se pensó en reedificar el hospital, llevando la gestión él mismo, quien se dirigió a los aragoneses y en particular a los zaragozanos bien acomodados, en demanda de auxilio moral y material preciso, pero las solicitudes no lograron éxito. Poco tiempo después tuvo lugar el segundo Sitio y al final del mismo, el proyecto de reedificación se consideró irrealizable.
El General Palafox, durante el segundo Sitio de Zaragoza, el 19 de Febrero de 1809, víspera de la capitulación, enfermo y con fiebre, dejó todos sus poderes en manos del Regente de la Real Audiencia, Don Pedro María Ric, Barón de Valdeolivos, el cual nombró una Junta Suprema de Gobierno compuesta por 34 personas, entre las que se encontraba José María Dara Sanz, IX Barón de Purroy, que tuvo que negociar con el Mariscal francés Lannes, la penosa tarea de poner fin a la tragedia que sufría Zaragoza y decidir su rendición el día 20 de Febrero de 1809.
José Dara Sanz, a los pocos meses abandona la ciudad de Zaragoza y se marcha a la villa de Vinaroz (Castellón) desde donde tras explicar por carta las penurias que el y su familia pasaron durante los asedios, formula la petición para que a sus tres hijos varones se le conceda la gracia de usar el uniforme de Cadetes de Reales Guardias Españolas. Petición que le será concedida a los pocos días.
De nuevo en Zaragoza, en el año 1814, José María Dara Sanz, junto a otros personajes de la Sitiada, dirige al Rey un manifiesto exponiendo la situación del Hospital Nuestra Señora de Gracia, que el mismo Fernando VII escuchó en su visita a Zaragoza. Fue Regidor del citado hospital hasta el año 1819, fecha en que falleció.
Sin ningún lugar a dudas José María Dara Sanz, IX Barón de Purroy fue calificado héroe de los Sitios de Zaragoza.
El Ayuntamiento de Zaragoza le dedicó una calle en el Barrio Oliver denominada "Barón de Purroy" que está ubicada entre las calles de Antonio Leiva y Fray Luis de León.
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